La EMA cree que el consumo prolongado de estos fármacos, sobre todo en dosis elevadas, acarrea graves riesgos para la salud
La Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha lanzado una alerta sanitaria sobre los riesgos para la salud que puede provocar el consumo prolongado de fármacos que contienen ibuprofeno y codeína. La toma conjunta de ambos principios activos, normalmente utilizados para mitigar el dolor, puede dar lugar a «graves daños renales y gastrointestinales, incluso mortales, especialmente cuando son tomados durante más tiempo y a mayores dosis de lo recomendado».
En los últimos meses se han registrado varios fallecimientos de personas que tomaban con asiduidad este tipo de medicamentos, lo que ha hecho saltar las alarmas de la EMA. Al parecer, ninguna de estas muertes se ha registrado en España y sólo se han detectado en países donde se venden sin receta médica.
En todo caso, las autoridades sanitarias europeas advierten que ha detectado «intoxicaciones renales, gastrointestinales y metabólicas relacionadas con el abuso» de este tipo de medicamentos. «Cuando se toma de forma prolongada la combinación ibuprofeno con codeína y a dosis superiores a las recomendadas, se causa daño a los riñones, impidiéndoles eliminar adecuadamente los ácidos de la sangre y provocando acidosis tubular renal», añade la EMA en un comunicado.
Mareos y dependencia
Además, el mal funcionamiento de los riñones puede provocar, bajos niveles de potasio en sangre lo que deriva en debilidad muscular y mareos. Asimismo, la EMA advierte que su consumo prolongado pueden provocar dependencia a la codeína, algo muy peligroso sobre todo en los países en los que se venden sin receta médica.
El ibuprofeno es un antiinflamatorio no esteroideo (AINE), utilizado frecuentemente como antipirético, analgésico y antiinflamatorio. Se suele tomar para el alivio sintomático de la fiebre, dolor de cabeza (cefalea), dolor dental (odontalgia), dolor muscular o mialgia, molestias de la menstruación (dismenorrea), dolor neurológico de carácter leve o moderado y dolor postquirúrgico.
La codeína (DCI) o metilmorfina es un alcaloide que se encuentra de forma natural en el opio. Se utiliza con fines médicos como analgésico, sedante y antitusígeno. También se le considera un narcótico. Puede presentarse en forma de cristales inodoros e incoloros o bien como polvo cristalino blanco.
Fuente: El Correo