Las féminas enfrentan limitaciones en acceso al financiamientos para sus negocios respecto a sus pares masculinos, según informe del MEPyD
En República Dominicana, la creciente participación de las mujeres en el sistema bancario refleja un avance hacia una mayor inclusión financiera. Sin embargo, la brecha entre los fondos captados y el crédito otorgado a hombres y mujeres no solo persiste, sino que se amplía.
A pesar de que las mujeres demuestran una mayor capacidad para cumplir con sus obligaciones financieras, siguen pagando tasas de interés más elevadas en sus préstamos.
Un reciente informe del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD), basado en datos de la Superintendencia de Bancos (SB), revela que, a diciembre de 2024, las acreedoras femeninas enfrentaban una tasa promedio del 20.66%, 0.23 puntos porcentuales más que el 20.43% que pagaban los hombres en la misma fecha.
“Aunque esta brecha se ha reducido progresivamente desde 2022, la persistencia de tasas más altas para las mujeres sugiere diferencias en el perfil de riesgo percibido por las instituciones financieras o en las condiciones de los créditos otorgados”, señala el Mepyd en su último Informe de Situación Macroeconómica con perspectiva de género.
En términos generales, el sistema financiero dominicano continúa creciendo, con una cartera total de créditos que alcanzó RD$2.1 billones al cierre de 2024, lo que representa un incremento del 12.5% respecto al año anterior, según el último informe anual sobre desempeño de la Superintendencia de Bancos. Este crecimiento ocurre a pesar de que las tasas de interés se mantienen elevadas debido a un rezago en la transmisión de la política monetaria.
No obstante, al desglosar los datos por tipo de cartera, se observa que la mayor disparidad se encuentra en los créditos comerciales, donde la brecha alcanza los 4.31 puntos porcentuales en perjuicio de las mujeres. Este dato pone de manifiesto las barreras al acceso al financiamiento bruto, a pesar de que ellas lideran más del 50% de las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), según la empresa Alegra.
Las cifras sobre la brecha de género en cuanto a deuda por tipo de cartera revelan diferencias significativas tanto en el acceso al crédito como en los montos financiados.
En diciembre pasado, la deuda acumulada por mujeres en créditos comerciales representó aproximadamente el 33.6% del total registrado por hombres, sugiriendo limitaciones considerables para acceder al financiamiento necesario para sus negocios.
En cuanto a los préstamos de consumo, el informe indica que la participación femenina ha disminuido levemente hasta situarse en un 66.3%. En contraste, el acceso a créditos hipotecarios muestra una tendencia más equitativa, con un 86.2% para las mujeres; sin embargo, aunque tienen más préstamos que los hombres en este segmento, los montos manejados son inferiores.
Los bancos
La Asociación de Bancos Múltiples de República Dominicana (ABA) destacó que el crédito otorgado a mujeres aumentó significativamente durante la última década: pasó de RD$99,341 millones en 2014 a RD$352,508 millones al cierre del año 2024.
Este crecimiento acumulado del 255% durante la última década supera al registrado por los hombres (12.3%), lo cual ha mejorado su participación en el crédito bancario del 35.1% en 2014 al 37.7% en 2024.
No obstante, la ABA también reconoció que persisten barreras estructurales que limitan la inclusión financiera y el desarrollo productivo de las mujeres dominicanas a pesar del progreso logrado durante la última década.
Conforme con la clasificación de riesgo del saldo adeudado, el informe del Mepyd señala que al cierre de 2024 las mujeres mostraron mayor capacidad de cumplimiento. En el nivel más bajo de riesgo (A), el 93.2% de las mujeres y 91.2% de los hombres están concentrados, indicando una ligera ventaja en la gestión de su deuda.
Según cifras de diciembre de 2024, los depósitos a nombre de mujeres alcanzaron RD$695.5 mil millones, lo que representa un crecimiento interanual del 12.5%. En contraste, los hombres lograron acumular RD$928.9 mil millones, generando una diferencia de RD$233.3 mil millones.
El informe del Mepyd, con datos de la SB, señala que este comportamiento podría vincularse a factores como acceso limitado a productos financieros, carga desproporcionada de responsabilidades económicas en el hogar y dependencia financiera.
Fuente: el Dinero